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UPporA denuncia que Salud obliga a la población a “pagar de su bolsillo” las pruebas diagnósticas ante el colapso de la Sanidad Pública en Córdoba

Naranjo señala que el Gobierno andaluz está “incumpliendo el principio de universalidad” de la atención sanitaria pública y generando “una discriminación por motivos económicos”

La parlamentaria de Unidas Podemos por Andalucía (UPporA), Ana Naranjo, ha denunciado que la limitación de pruebas diagnósticas de Covid-19 en la Sanidad supone “una discriminación” por motivos económicos, ya que “condena a las personas que tienen sospechas de haberse contagiado a pagarlas de su bolsillo, acudiendo a la sanidad privada o a buscando test de autodiagnóstico en las farmacias, que se encuentran desabastecidas de este producto e inflan los precios”. Naranjo ha lamentado que en provincias como Córdoba, ante el “colapso” del Sistema Andaluz de Salud (SAS), se están imponiendo “instrucciones que restringen la realización de pruebas diagnósticas a un segmento determinado de la población rompiendo con el principio de universalidad que debe regir la Sanidad Pública”.

Ante esta situación, desde UPporA han reclamado “un refuerzo urgente del SAS, la agilización del calendario de vacunación para población infantil y terceras dosis, la intensificación de las labores de rastreo y la realización de pruebas diagnósticas a toda la población que haya tenido contacto con positivos o tenga síntomas compatibles”. Naranjo ha pedido que Salud “ponga todos los recursos a disposición del difícil momento que atravesamos”, ya que “está comprobado que la detección precoz que permite realizar aislamientos es lo único que frena la transmisión del virus, actualmente descontrolada en Córdoba con mil contagios diarios”.

Naranjo ha lamentado que la situación actual se debe a “la irresponsabilidad del Gobierno andaluz, que desoyó todas las voces que alertaban sobre las consecuencias de despedir a 8.000 sanitarios en Andalucía, casi un millar en Córdoba”. Para la diputada andaluza “la pandemia debe atenderse desde lo público para que no existan personas enfermas de primera y de segunda categoría en función de su situación económica”, ya que “no todas las personas pueden permitirse pagar por una prueba diagnóstica que, además, está siendo objeto de especulación en farmacias y centros de salud privados”.

Para una provincia segura, especialmente en vísperas de la Navidad y en plena sexta ola, “no podemos consentir que los centros de salud estén cerrados por las tardes”, más aún cuando “por otro lado desde el Gobierno andaluz se incentiva la apertura de espacios de consumo como los centros comerciales incluso en horarios y días en los que tradicionalmente se encontraban cerrados”. Para Naranjo, esto es “un ejemplo claro de cuál es la política de las derechas, que no se preocupan por la salud pública sino por que las empresas hagan caja en un momento crítico para la población”.

La diputada andaluza ha recordado que “decían que saldríamos más fuertes de la pandemia, pero por ahora solo están saliendo más fuertes quienes se lucran con las decisiones que toma el Gobierno andaluz a costa del debilitamiento de los servicios públicos fundamentales, como la Sanidad”.