Cierre de oficinas bancarias en Córdoba «¿Cómo sacarán su pensión ahora?»
Los alcaldes de El Guijo, Torrecampo o Albendín revelan los efectos del cierre de sucursales en los más mayores
l Guijo es el municipio más pequeño de la provincia de Córdoba. Según la última actualización sobre población del INE, a 1 de enero de 2019, contaba con 355 habitantes. A la par, es uno de los núcleos más viejos, pues la edad media de sus habitantes ronda los 51 años. El próximo día 20 cerrará la única oficina bancaria que existe, la de CajaSur, que sólo abría un día a la semana (el lunes) por el traslado de un trabajador a la zona.
En pocas fechas, lo que era un campo expedito para este fenómeno del «apagón» de sucursales en Córdoba se ha cobrado tres emplazamientos: al El Guijo se suman Conquista (379 vecinos) y la pedanía baenense de Albendín (unos 1.300 habitantes). Incluso en los últimos días, y como ya ocurriera en este punto de la Campiña Guadajoz-Este, las protestas de los vecinos se han replicado en Torrecampo, donde ha echado el cierre otra oficina (Rural del Sur como en el caso de Baena, donde se manifestaron decenas de personas ya que hay unos 700 clientes que pertenecen a una misma cooperativa agraria).
El planteamiento de las entidades es el mismo: la reorganización de su red comercial y la adecuación a la demanda y a un nuevo modelo tecnológico que les permite ser más eficientes. En la época de «vacas gordas» había casos de duplicidad de muchas entidades en estas pequeñas poblaciones. Hubo hace pocos años un primer escalón con la fusión de oficinas. Las alternativas pasan por desplazarse a un municipio aledaño, la operativa «on line» para hacer transferencias o consultar saldos. La aparición de trabajadores que acuden unos días en semana a estos lugares -especialmente en Castilla y León donde la merma ha sido más cruenta-, oficinas móviles, aplicaciones móviles…
El propio Banco de España cree que «aquellos municipios sin oficina bancaria no implica necesariamente que estén en situación de exclusión financiera», aunque matiza que «es cierto que el uso de las facilidades ‘online’ entraña cierta dificultad para determinados segmentos de la población».
Protestas de los alcaldes
Jesús Fernández es el alcalde independiente de El Guijo por el CDEI. ha pedido que al menos se mantenga un cajero automático en su pueblo. «Hay mucha gente mayor que no puede desplazarse con facilidad por sus situaciones personales, viven solas y superan los 70 años. Para ellos, moverse de municipio para realizar sus gestiones bancarias es imposible. ¿Cómo sacarán la pensión?», se pregunta. Pedroche, Torrecampo o Pozoblanco será el destino de los guijeños.
La inquietud en esta malla de peqqueños núcleos crece. Están en el centro de la diana de un proceso de despoblamiento que parece irreversible. Francisca Alamillo es la regidora de Torrecampo (1.059 habitantes). Tiene 35 años, otro perfil joven como ocurre con el alcalde guijeño. La supresión de la oficina de Caja Rural también ha desatado las críticas de sus vecinos, que están recogiendo firmas. «Esperemos que ante las movilizaciones y la recogida de firmas se pueda reconsiderar esta decisión», expresa.
En la misma tesitura se ha visto el responsable pedáneo de Albendín, José Antonio García, quien señalaba que «no sabemos los motivos del cierre, le dirigimos una carta desde el Ayuntamiento a la dirección de la oficina y no nos han contestado». En este caso los vecinos tendrán que acercarse a la propia Baena, una distancia más corta que los casos anteriores. Las quejas han saltado a la Red, donde el blog Ruralpedia.es ha puesto en marcha una campaña de recogida de firmas a través de la plataforma Change.org ante «el goteo de cierre de sucursales bancarias en pueblos de toda la geografía española»